El bebé: Desarrollo en la semana 29 de embarazo.

En esta semana entras en el tercer y último trimestre del embarazo. El feto está muy desarrollado, y sus medidas alcanzan ya los 38 cm., llegando a pesar alrededor de 1.300 gr.

A partir de esta semana empezará a darse la vuelta reposando sobre el cuello de tu útero. Esta postura hará que te dé las patadas en la parte alta del abdomen.

Los huesos, aún blandos y flexibles, están completamente desarrollados y tienen su forma definida. La piel comienza a tornarse rosa y lisa, y el vérmix caseoso continúa aumentando y cubriendo todo su cuerpecito.

El sistema nervioso central sigue su proceso de maduración. Su cerebro ha madurado tanto que ya es capaz de regular su temperatura corporal, aunque, por supuesto, aún necesita el calor de tu cuerpo para mantenerse caliente. También sigue desarrollando células nerviosas del cerebro. Al nacer, tendrá cientos de miles de millones de ellas.

En el aparato respiratorio los alveolos creados en etapas anteriores siguen su proceso de maduración incrementando la capacidad del pulmón para intercambiar oxígeno.

En el caso de ser niño los testículos continúan con el proceso de descenso desde el abdomen hasta la bolsa escrotal.

La madre: Cambios en la madre en la semana 29 de embarazo.

El aumento de peso en el tercer trimestre suele estar sobre el medio kilo por semana, y es posible que por este aumento de peso puedas sentirte más torpe de lo habitual, en determinados movimientos, o que te canses antes.

Como ya venimos aconsejándote desde hace varias semanas es importante que mantengas la piel bien hidratada con cremas específicas, sobre todo abdomen, muslos, caderas y pechos. Es importante la prevención de las estrías, ya que una vez aparecen es muy difícil que desaparezcan.

Estás en la recta final del embarazo por lo que te conviene llevar una vida más tranquila disminuyendo en la medida de tus necesidades el nivel de actividad diaria. Debes evitar realizar esfuerzos excesivos, realizando pausas frecuentes.