El bebé: Desarrollo en la semana 37 de embarazo

A partir de esta semana ya se considera un bebé llegado a término. Sus medidas aproximadas son 48 cm de longitud desde la cabeza a los pies y 2.900 gr. de peso.

A pesar de estar ya completamente formado, el feto sigue acumulando grasa bajo su piel, que le permitirá, tras el nacimiento, regular su temperatura corporal y mantener los niveles de glucosa correctos.

La cabeza del niño ya debe estar encajada en el canal del parto, entre los huesos de la pelvis. Aproximadamente un 3% de los fetos en lugar de la cabeza, introducen las nalgas o los pies en el canal del parto, es la llamada presentación podálica.

Cada vez lo notarás moverse menos ya que el sitio que tiene en el útero es considerablemente más reducido y no le permite tanta libertad de movimientos.

La madre: Cambios en la madre en la semana 37 de embarazo

El cuello del útero empieza a prepararse para el momento del parto, por lo que puede aparecer un pequeño sangrado o hebras de sangre en tu ropa interior. Esto es producido por la dilatación que lleva a cabo el cuello del útero. A veces aparece después de una exploración de tu ginecólogo o matrona, pero suele ser un manchado escaso. No te alarmes, a no ser que el sangrado sea abundante.

En otras ocasiones, también por la dilatación cervical, puede producirse la expulsión del tapón mucoso, que es una secreción pegajosa transparente o de color marrón. El hecho de expulsar el tapón mucoso no indica que se vaya a desencadenar el parto. Desde que se expulsa, hasta el momento del parto, pueden pasar horas o incluso semanas.

Los movimientos fetales son uno de los primeros signos de viabilidad fetal, aunque conforme va avanzando el embarazo, los movimientos pueden disminuir debido al crecimiento del feto que reduce cada vez más su espacio. No obstante, la ausencia aguda de movimientos fetales durante más de dos horas en una gestante que anteriormente los percibía, así como la percepción de una disminución de movimientos fetales con respecto a su patrón habitual, durante más de 12 horas, requieren una consulta con el médico inmediata.