El bebé: Desarrollo en la semana 12 de embarazo.

En esta semana el proceso de la formación del embrión casi ha terminado por lo que empieza a denominarse feto, empezando con ello lo que en medicina se conoce como la etapa fetal. Una vez pasadas estas semanas el bebé ya no será tan susceptible a agentes externos que puedan interferir en su desarrollo. A partir de este momento crecerá rápidamente y sus órganos seguirán madurando de una manera acelerada.

Sus medidas estarán rondando los 5 o 6 cm, y su peso será de unos 14 gr.

En este momento todos los sistemas principales ya están formados y colocados en su sitio aunque aún no están desarrollados. El sistema digestivo cada vez es más sofisticado, al principio era un simple tubo, ahora ha ido creciendo y curvándose sobre sí mismo para poco a poco empezar a parecerse a lo que conocemos como esófago, estómago, intestino delgado e intestino grueso. El riñón produce cada vez más orina, aunque muchas funciones que tendrá en el futuro todavía no han aparecido. Para todas las funciones que él aún no puede realizar está la placenta y tu organismo, pues será el que realice el trabajo por ti y por el del feto hasta muy avanzado el embarazo.

Todo va avanzando rápidamente, se están formando las cuerdas vocales, en las manos y los pies ya se ven los dedos separados y tienen movimiento, las uñas están creciendo, aparece el primer vestigio de pelo en su cuerpo, y los genitales externos ya están diferenciados, sólo que aún es difícil distinguir por ecografía.

La madre: Cambios en la madre en la semana 12 de embarazo.

Es probable que las molestas náuseas que probablemente has ido sintiendo hasta este momento desaparezcan, así es en el 60% de los casos, el resto o bien desaparecen sobre las 16 semanas, ó, en un 10% de los casos persisten hasta el fin del periodo gestacional, aunque con menos intensidad que en las primeras semanas. Esto es debido a un factor hormonal.

También es habitual que te encuentres la piel más suave y radiante durante el embarazo. La razón fisiológica es por el aumento del volumen sanguíneo y las hormonas del embarazo, que aumentan la secreción de las glándulas sebáceas, dando un aspecto sano a la piel. Sin embargo, en ocasiones, este aumento de secreción sebácea puede acarrear problemas temporales de acné.

Por lo demás, aún es pronto para sentir al bebé, aunque algunas gestantes que ya han estado embarazadas previamente, son capaces de sentir los movimientos fetales desde el comienzo del segundo trimestre de gestación.