El síndrome del ovario poliquístico está relacionado con cambios en el nivel de ciertas hormonas. No se sabe por qué o cómo se producen estos cambios, pero dificultan a los ovarios de una mujer la liberación de óvulos maduros.

Normalmente se liberan uno o más óvulos durante el ciclo menstrual, es lo que se denomina ovulación, pero en el síndrome de ovario poliquístico, los óvulos maduros no se liberan, formando pequeños quistes, lo que puede contribuir a problemas de infertilidad.

La mayoría de las veces este síndrome es diagnosticado en mujeres con edades comprendidas entre los 20 y 30 años, sin embargo, también puede afectar a niñas adolescentes, empezando con los síntomas cuando se inician los períodos. Con frecuencia, este trastorno está presente en familiares allegados de las mujeres que lo padecen.

Los síntomas que nos pueden indicar este síndrome principalmente están relacionados con cambios en la menstruación, variando desde ausencia de períodos menstruales, después de haber tenido uno o más períodos normales, hasta períodos menstruales irregulares, que pueden ser intermitentes y pueden ser desde muy ligeros a muy abundantes.

También puede presentar otro tipo de síntomas entre los que estarían:

  • Hirsutismo (Vello facial excesivo)
  • Resistencia a la insulina (70-80% de las mujeres con SOP son insulinoresistentes)
  • Acné
  • Aumento de peso repentino
  • Manchas marrones alrededor de la nuca o del cuello

La revisión ginecológica es importante para detectar el síndrome de ovario poliquístico. Con una ecografía y análisis hormonales el especialista puede confirmar si es realmente este trastorno el que se padece y mandar el tratamiento adecuado para según el caso que trate.

Igualmente si se tiene planeado el embarazo en un plazo cercano, es importante que su ginecólogo esté al tanto y pueda aconsejar para tener mayores opciones de conseguir su objetivo.